LA CAZA DEL ARCE

Si en Girona comentan que van a “caçar bolets”, en Japón dicen que salen de “momijigari”, cazar arces rojos. También aquí la “caça” es más metaforica que real, pero no se refiere a ir al bosque para cortar los árboles, llevárselos a casa y comérselos a la brasa con ajo i perejil, sino a la costumbre de ir en otoño, en búsqueda de los sitios donde las hojas han alcanzado en rojo más intenso.El culto al cambio estacional está muy presente en las arte y la literatura.Tan interiorizado por los japoneses que muchos creen que este es uno de los pocos países que tiene cuatro estaciones bien definidas.La contemplación de la naturaleza es una costumbre que define la identidad japonesa.