Los dos objetos más visibles del firmamento, Venus y la Luna, jugaron ayer por la tarde al gato y el ratón en un espectáculo astronómico para todos los públicos. La Luna en fase creciente fue acercándose al planeta hasta que a las 16.40 lo tapó por completo, durante una hora y 25 minutos, y luego se apartó para que volviera a emerger.
Mientras, no muy lejos, Júpiter también exhibía su brillo. "Se ha visto muy bien porque el cielo estaba despejado". La ocultación de Venus no es un fenómeno extraño, pero solo se puede ver en directo en un mismo lugar una vez cada cinco o seis años.
Fuente, el Periódico
Mientras, no muy lejos, Júpiter también exhibía su brillo. "Se ha visto muy bien porque el cielo estaba despejado". La ocultación de Venus no es un fenómeno extraño, pero solo se puede ver en directo en un mismo lugar una vez cada cinco o seis años.
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